sábado, 11 de febrero de 2012

Las tres moralejas

“ … si prestan atención les voy a narra una pequeña historia:

En un valle un pollito jugaba alegremente, disfrutando de un hermoso día de sol. Un águila en lo alto del cielo lo ve e inmediatamente comienza un rápido descenso hacia su almuerzo. Una vaca ve al águila en vuelo en picada y al pobre pollito que continuaba jugando alegremente ignorando el inminente peligro. La vaca sin pensarlo dos veces pasa por encima del pollito y lo caga puaggg suelta su carga. El águila viendo la cochinada que era ahora el pollito se aleja rápidamente. El pollito lleno de mierda comienza a requintar acaloradamente, escuchándose en el valle otra cosa que no sea ¡PIO! ¡PIO! ¡PIO! del embarrado y enojado pollito. Rápidamente acude en su ayuda un zorro conmovido por el incesante ¡PIO! ¡PIO! ¡PIO! y lo limpia. El pollito viéndose otra vez limpio y sano se llena de emoción por la bondad del zorro y busca las mejores palabras para agradecerle. El zorro viendo limpio al pollito se lo come.

Ahora como toda historia, aquí tres moralejas:

Primera: No siempre el que te caga es tu peor enemigo.
Segunda: No siempre el que te ayuda es tu mejor amigo.
Tercera: Cuando estés “cagao” es mejor no decir ni pio.”

(Me la contaron en el curso de Psicología Deportiva. 1990. UNMSM. Escuela de Educación Física.)

1 comentario:

  1. Excelente anecdota, siempre muy aplicable. A mi tambien me la contaron por ahi de finales de los 80's y medio me acordaba de ella pero gracias por pubicarla.

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